Juego de cadena de distribución para todos los vehículos

Avería en la cadena de distribución

La cadena de distribución garantiza que las válvulas de admisión y escape del motor se abran y cierren en el ciclo correcto, es decir, en línea con el cigüeñal. Si se desgasta o incluso se rompe, ya no puede cumplir esta tarea y, en el peor de los casos, puede incluso provocar daños en el motor. Por lo tanto, si sospechas que tienes una avería en la cadena de distribución, no esperes demasiado y lleva el coche al taller cuanto antes.

¿Qué hace la cadena de distribución?

Hasta los años 80, sólo se utilizaban cadenas de distribución para transmitir el movimiento de rotación del cigüeñal al árbol de levas. Hoy en día, en lugar de las cadenas de distribución se suelen utilizar correas de distribución que ahorran espacio y son más baratas (puedes leer el artículo "Cambiar las correas de distribución"). Sin embargo, la cadena de distribución no está en absoluto obsoleta: especialmente en los vehículos de alta cilindrada, la cadena de distribución se sigue utilizando porque puede transmitir fuerzas más elevadas que la correa de plástico.

A diferencia de las correas de distribución, las cadenas de distribución no suelen necesitar mantenimiento. No obstante, deben estar siempre bien lubricadas (¡controla el nivel de aceite en el motor!) y sustituirse si es necesario.

Hay dos tipos de cadenas de distribución: la cadena de distribución simple, que tiene una sola fila de cadena y una vida útil de unos 100.000 km y la cadena de distribución doble (o cadena de distribución dúplex), que tiene una doble fila de cadenas, por lo que es mucho más resistente y tiene una vida útil de hasta 500.000 km.

¿Cómo reconocer una avería en la cadena de distribución?

Las correas de distribución pueden romperse, pero las cadenas de distribución pueden desgastarse con el paso del tiempo (entonces se "alargan") y dejar de estar bien ajustadas. Sin embargo, la fatiga de los materiales también es concebible con la cadena de distribución y, en raros casos, la cadena de distribución puede incluso romperse, causando daños en el motor. Por lo tanto, se debe revisar su estado hacia el final de su vida útil prevista.

Síntomas de avería en la cadena de distribución: no siempre se puede percibir un fallo en la cadena de distribución. Sin embargo, ponte en alerta si se presentan los siguientes síntomas

• Ruidos de traqueteo del motor (posiblemente sólo en el arranque en frío)
• Pérdida de rendimiento del coche
• Luz de fallo de motor encendida

Es muy raro que se de el caso de una cadena de distribución rota. En este caso, ya no podrás seguir conduciendo, sino que tienes que remolcar el coche y llevarlo a un taller.

En el caso de una avería, el problema no suele estar en la propia cadena de distribución, sino en uno de sus accesorios, a menudo el tensor de cadena o los carriles guía. Se deben sustituir ambos cada 100.000 hasta 300.000 km y es una buena idea hacer cambiar la cadena de distribución al mismo tiempo, ya que el trabajo es el mismo. El coste de la cadena no es especialmente alto.

¿Cuánto cuesta cambiar una cadena de distribución?

En primer lugar: sólo los mecánicos y profesionales experimentados deben cambiar la cadena de distribución. Para el resto de manitas, el riesgo de causar daños en el motor es demasiado grande. Normalmente, no sólo se instala la cadena de distribución, sino un juego completo de cadena de distribución. Además de la cadena de distribución, incluye la barra guía, el tensor de la cadena, el retén de aceite y los piñones.

Si llevas el coche al taller para que te cambien la cadena de distribución, esto es lo que hacen:

• Drenar el aceite y el agua de refrigeración
• Retire los accesorios (por ejemplo, la correa trapezoidal).
• Desenroscar la tapa de la distribución
• Retire el conjunto de la cadena de distribución antigua y coloque la nueva.
• Vuelva a atornillar la tapa, coloque los accesorios y rellene con aceite y refrigerante nuevos. Lo mejor es sustituir el filtro de aceite al mismo tiempo.

El juego de cadena de distribución cuesta entre 100 y 300 euros, según el modelo de coche y la calidad. El trabajo en el taller es considerablemente más caro. Dependiendo de la facilidad para llegar a la cadena de distribución, el cambio puede durar 5 horas, pero también puede durar varios días. Por ello, los costes en un taller multimarca pueden oscilar entre 350 y 1.400 euros, y aún más en un taller oficial.

Preguntas frecuentes