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El tanque o depósito de combustible es un componente esencial para los vehículos. Su principal función es almacenar el combustible necesario para el coche, normalmente gasolina, diesel o gas, de forma segura. Además, el tanque tiene una conexión con el quemador o una máquina para permitir que el vehículo funcione permanentemente.
Hasta ahora, se han utilizado principalmente dos materiales diferentes en el sector del automóvil. Especialmente en el caso de los vehículos comerciales, los fabricantes a menudo decidieron en el pasado utilizar un contenedor de acero para sus depósitos de combustible. El acero ofrece un alto grado de robustez y se caracteriza por una larga vida útil. Sin embargo, todavía hay un riesgo de corrosión además de que es menos flexible a la hora de su instalación en el coche. Por lo tanto, los vehículos modernos utilizan tanques de combustible hechos de plástico. Ofrecen, entre otras, las siguientes ventajas:
Una de las fuentes de peligro más frecuentes para el funcionamiento de un tanque de combustible es la penetración de sustancias en el tanque, especialmente agua o lodo. Además, se suelen producir daños en caso de accidente. En ocasiones, el uso de gasolinas de baja calidad puede afectar al estado del depósito de combustible. Después de varios años de funcionamiento, tampoco es raro que haya daños en el tanque. Otra posible causa pueden ser fugas. Dependiendo de la causa, pueden producirse los siguientes patrones de daño:
En primer lugar, a menudo se nota un problema por un aumento significativo del consumo de combustible. Sin embargo, este síntoma por sí solo no indica directamente que el tanque sea la causa, ya que el motor también puede verse afectado directamente. Un síntoma específico, por otro lado, son olores a combustible en la cabina de pasajeros. Además, el vehículo se sacude mientras conduce. Las interrupciones de los ciclos del motor a bajas velocidades también deben hacer que se revise el tanque. Las señales más obvias también incluyen manchas de combustible que aparecen en el tanque y debajo del auto después de un corto período de estar parado.
Para hacer un diagnóstico, primero debe inspeccionar visualmente el tanque. En el mismo paso se recomienda medir la presión en el tanque; los valores óptimos se indican en el manual del vehículo. La válvula de rebose del tanque también debe cerrarse a 45 grados, si no lo hace, la parte defectuosa puede haber sido encontrada.
El procedimiento para reemplazar el tanque de combustible difiere según el modelo y la marca del auto. Lo que no cambia es que hay que desconectar todas las líneas y mangueras de suministro. Los tapones de llenado, los conductos de ventilación, el conducto de combustible y la conexión del sensor de nivel ya no deben estar en contacto con el depósito. Muchos modelos de coches fijan el depósito con correas de tensión bajo el suelo del coche. Después de haber aflojado las conexiones de los tornillos, puede retirar el tanque y reemplazar la parte nueva correspondiente.
Para daños menores no siempre es necesario reemplazar el tanque de combustible. Las fugas en los tanques de plástico pueden cerrarse utilizando resina epoxi o soldadura de plástico. Se usan líquidos especiales para el metal, que simplemente se llenan en el tanque. Por supuesto, tendrá que investigar la causa y tal vez reemplazar el sello o el componente con fugas si hay un daño permanente.
No hay información específica sobre la vida útil de los tanques de combustible. En principio, se puede utilizar este componente durante toda la vida útil del vehículo. Solo en el caso de un daño específico será necesaria la reparación o el cambio En DAPARTO encontrará las mejores ofertas de depósitos de combustible. Entre las marcas que encontrarás en nuestra web está Bosch, uno de los líderes del mercado en muchos segmentos que cuenta con una línea de producción de tanques de combustible. También encontrarás el conocido y renombrado fabricante Van Wezel en el portal. En DAPARTO podrás comparar los artículos disponibles para tu coche.