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La válvula mariposa, también denominada cuerpo de mariposa o cuerpo de aceleración, es un componente mecánico que se encuentra en el conducto de admisión del motor. Esta pieza controla la entrada de aire al múltiple de admisión a través de una mariposa que, al pisar el acelerador, se abre o se cierra. La válvula mariposa se encuentra en el cuerpo del acelerador, entre el filtro de aire y el colector de admisión.
La función principal del cuerpo de mariposa es regular el suministro de mezcla para el motor de combustión. El cuerpo de mariposa tiene diferentes usos dependiendo de los diferentes tipos de motores: gasolina y diésel.
En primer lugar, en los motores de gasolina, el régimen o la potencia del motor se controla a través de la alimentación de mezcla. Esto significa que, dependiendo de la distancia que esté abierta la válvula de mariposa, se introduce más o menos aire fresco en el conducto de combustión.
En los motores diésel modernos, la válvula de mariposa sólo se utiliza para evitar sacudidas, si es posible, cuando el motor está apagado.
Con el fin de contribuir también al medio ambiente, los modelos más modernos no transmiten la petición del conductor a través del acelerador directamente a la válvula de mariposa. Como consecuencia, no se inyecta combustible automáticamente cuando se acelera, sino que añade el combustible que realmente se necesita. Así, la cantidad de contaminantes en el tracto de escape se mantiene al mínimo.
Entre las ventajas del cuerpo de mariposa de Valeo, por ejemplo, encontramos la mejora en el ahorro de combustible y la ayuda en el cumplimiento de las regulaciones de emisiones a través del tubo de escape.
Hay diferentes modalidades para accionar el cuerpo de mariposa:
No se debe cambiar el cuerpo de mariposa en un intervalo de tiempo específico durante la vida útil del vehículo. No obstante, sí que hay que prestar atención a las indicaciones de mantenimiento del fabricante para que la válvula de mariposa no se ensucie y deje de funcionar correctamente. Ten en cuenta que la suciedad provoca un desgaste prematuro, lo que hace que la válvula de mariposa deje de funcionar en última instancia.
Entre los indicios para identificar problemas en el cuerpo de mariposa, por ejemplo, podemos notar una peor respuesta del acelerador. También es posible que notemos que el vehículo regula el régimen de motor demasiado a la baja al pasar de la carga a la marcha en vacío y que, a continuación, el vehículo se apaga. Entre otros síntomas de una válvula de mariposa averiada, pueden producirse vibraciones en el coche.
Hay varias maneras de mantener y limpiar la válvula de mariposa. Una opción es limpiar el cuerpo del acelerador con un limpiador de acelerador, por ejemplo, el Liqui Moly 5111 Pro-Line. Al proceder a una limpieza de cuerpo de mariposa, asegúrate siempre productos especializados, ya que de lo contrario podrían producirse en la pieza. Por ejemplo, si se utiliza agua, pueden formarse depósitos que pueden perjudicar el funcionamiento de la válvula de mariposa. Tampoco se recomiendan los alcoholes puros ya que, en el peor de los casos, pueden ser abrasivos contra el material de la válvula de mariposa. Si no estás seguro, consulta un profesional o a un taller especializado.
Ten en cuenta que, si la válvula de mariposa se retira o se reemplaza, normalmente tendrá que ser sintonizada de nuevo. De este modo se garantiza un ajuste óptimo de todos los sistemas para que la válvula de mariposa pueda cumplir su función de aumentar la seguridad al conducir y reducir la contaminación.